El 27 de Mayo de 2004

Declaración del Movimiento de Documentalistas

EN EL DIA DEL DOCUMENTALISTA

Como quería Rodolfo Walsh, volvemos a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad.

En la década del setenta, las multinacionales y el capital financiero internacional lanzan una persistente ofensiva para imponer un dominio directo sobre la economía argentina con el fin de apropiarse de la riqueza nacional.
En 1975, tienen todo listo para su golpe final. Pero para ello necesitan descargar contra los trabajadores y el pueblo una represión tal que elimine todo factor de resistencia a su plan global de dominación.
En 1976, las fuerzas armadas -convertidas en ejército de ocupación al servicio del imperio neoliberal- dan comienzo al más siniestro plan de aniquilamiento de la resistencia obrera, popular y antiimperialista. En este contexto es secuestrado, torturado y asesinado nuestro compañero documentalista Raymundo Gleyzer. Este 27 de Mayo se cumplen 28 años de su secuestro a manos de un grupo de tareas de la dictadura genocida.
Tres años atrás, a iniciativa del Movimiento de Documentalistas se instituyó el 27 de Mayo, fecha de la desaparición de Raymundo, como el Día del Documentalista.
Hoy, con este pronunciamiento, el Movimiento de Documentalistas quiere rendir homenaje al compañero Gleyzer. Pero este homenaje sería sólo una declaración vacía, si no afirmáramos lo siguiente:
No hay homenaje ni gesto simbólico alguno que le haga justicia a él y los compañeros y compañeras torturados y desaparecidos que no sea continuar su lucha movilizándonos permanentemente junto a los explotados y los oprimidos.
El plan de dominio imperial que torturó y asesinó a Raymuno Gleyzer y a miles de luchadores obreros y populares sigue en absoluta vigencia, oculto por el doble discurso, la hipocresía y la mentira descarada.

Cada vez que un obrero resigna su dignidad de trabajador para no ser despedido, Raymundo vuelve a ser torturado.

Cada vez que un trabajador sube a un tren privatizado sin saber si llegará a destino, Raymundo vuelve a ser torturado.

Cada vez que un desocupado cobra un miserable subsidio en vez de tener un trabajo, Raymundo vuelve a ser torturado.

Cada vez que un trabajador camina decenas de cuadras para comprar una garrafa, Raymundo vuelve a ser torturado.

Cada vez que un albañil cae de un andamio, Raymundo vuelve a ser asesinado.

Por lo tanto, el Movimiento de Documentalistas en este 27 de Mayo redobla su compromiso de permanecer junto a los trabajadores/as y los sectores populares que resisten luchando como el único homenaje digno hacia nuestro compañero Raymundo Gleyzer.

De tal modo, como quería Rodolfo Walsh, volvemos a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad.

Miguel Mirra
En el Día del Documentalista, Movimiento de Documentalistas
27 de mayo de 2004